Aprovechando que los peques están de vacaciones, las piscinas ya están abiertas y que incluso muchos aprovecharéis el fin de semana para hacer una escapada, te propongo un tutorial que rescato del año pasado y que gustó muchísimo. Vamos a hacer barquitos de corcho con los peques. ¡Seguro que les encanta!
Materiales:
* Tres corchos de botella de vino
* Cuerda
* Retal de tela
* Un palillo de unos de 10 cm
* Pegamento para madera
* Aguja
* Tijeras
* Hilo
1.- Coge dos corchos y únelos con la cuerda, enrollando primero en uno y luego en otro y repitiendo el paso varias veces para que queden bien unidas. Volvemos a hacer lo mismo añadiendo un corcho más. Será la base de nuestro barquito, lo que va a hacer que flote. 2.- Cuando hayas dado unas cuantas vueltas y veas que los tres corchos están bastante bien unidos, anuda los dos extremos de cuerda y corta el sobrante. El cuerpo de tu barco tendrá por tanto tres corchos.
3.- Recorta un triángulo rectángulo de tela y, si quieres, dale un poco de curvatura a las líneas rectas, como ves en la imagen.
4.- Cose dos de los extremos al palo, uno en la parte superior y otra en la inferior. Para evitar que se mueva la tela, puedes poner un poco de pegamento textil en las uniones con el palo.
5. Haz un agujero con la punta afilada del palillo en el corcho de la base. Yo lo hice en el de en medio, como puedes ver en la foto que hay sobre estas líneas. Pon un poco de pegamento en la punta y únelo a los corchos. Deja secar y... ¡¡listo!!
Seguro que lo que ahora muchos os preguntas es: "¿Y esto flota?"- ¡¡Mira, mira!!
¡Que tengáis un feliz viernes!
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